A diferencia de los rellenos tradicionales, los bioestimuladores activan los fibroblastos para que el propio cuerpo regenere colágeno, mejorando la calidad de la piel a largo plazo.
Rejuvenecimiento progresivo y duradero
Los resultados aparecen de forma gradual y natural, con efectos que pueden durar entre 12 y 24 meses, dependiendo del producto y del paciente.
Mejoran la firmeza, elasticidad y textura de la piel
Ayudan a redefinir contornos, combatir la flacidez y suavizar líneas de expresión, sin cambiar las facciones.
No aumentan el volumen excesivamente
Ideales para quienes buscan un efecto tensor y de regeneración sin el volumen de un relleno dérmico.
Aptos para rostro, cuello, escote, glúteos, brazos y abdomen
Tratamiento versátil que permite mejorar zonas difíciles o comúnmente olvidadas con gran seguridad.
Estimulan un rejuvenecimiento global, no solo superficial
Actúan a nivel profundo, mejorando la estructura de la dermis desde adentro hacia afuera.
Compatibles con otros tratamientos estéticos
Se pueden combinar con toxina botulínica, ácido hialurónico, láseres, hilos tensores, PRP, etc., potenciando resultados.